Escrito por: 5 más el descuento

viernes, 17.02.2017

Proponemos que se saque a concurso la explotación de las instalaciones para que no les cueste a las instituciones un millón de euros al año.

El Grupo Municipal Ganemos Albacete ha denunciado la falta de rigor y de profesionalidad en la gestión del Circuito y el nulo interés de los gobernantes de las instituciones por intentar reconducirla, permitiendo así que se consolide una inercia que nos cuesta a los ciudadanos y ciudadanas un millón de euros al año, sin tener datos objetivos y reales de cómo esa financiación pública revierte en beneficios para la ciudad de Albacete.

Así lo ha manifestado esta mañana el concejal de Ganemos Albacete, Héctor García, quien ha explicado que el rechazo de este grupo a las cuentas presentadas se justifica en que es inadmisible que cierren con un déficit de 200.000 euros, a pesar de que se ha mantenido la excesiva dependencia de la aportación de las instituciones, no es de recibo que el Ayuntamiento y la Diputación de Albacete aporten 950.000 euros para mantener unas instalaciones que año tras años arroja pérdidas al cierre del ejercicio.

Igualmente es inadmisible –ha continuado diciendo Héctor García- que los Presupuestos del 2017 recurran a fórmulas de ingeniería económica para aprobar unos presupuestos ficticios, ya que inflan los ingresos, porque es el único resquicio legal para poder aprobar unas cuentas que arrastran un déficit previsible de más de 200.000 euros. Según lo aprobado el Circuito tendrá 1.367.158,00 euros en gastos y 1.505.200,00 euros en ingresos, presentándose por tanto un superávit inicial de 138.042,00 euros, “aunque cuando vuelva a cerrarse el ejercicio el superávit previsto se tornará en déficit”.

El concejal de Ganemos ha recordado que este grupo planteó el verano pasado, en reuniones con la dirección, la posibilidad de explorar otros cauces para aumentar los ingresos e hizo algunas propuestas para un mayor aprovechamiento de las instalaciones, sin haber obtenido respuesta hasta la fecha. “Y mucho nos tememos que esta inercia y esta desidia que caracteriza la gestión y dirección del Circuito, carente de rumbo y de objetivos, va a continuar debido a la falta de voluntad de los dirigentes políticos del PSOE en Diputación y del PP en el Ayuntamiento”.

Héctor García se ha referido también a un informe que se envió a los miembros del Consorcio y que no viene avalado por nadie, pese a que en él se afirma que, según la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería el Circuito reporta a la ciudad un beneficio de 1.250.000 euros, afirmación que no se basa en datos fiables ni en estadísticas constatables.

Informe sin credibilidad

Dicho informe produce además sonrojo no sólo porque las primeras páginas se hayan cogido de la Wikipedia, sino porque lo que se supone que es de cosecha propia nos regala perlas como que “el circuito organiza acontecimientos al año por los que pasan 20.000 personas, lo que implica la ocupación de 10.000 camas hoteleras”, o “se han acreditado 1.000 periodistas de países, cuya presencia supone una promoción de la ciudad y la provincia”, o “los asistentes al Gran Premio se gastaron una media de 120 euros por aficionado”.

A Ganemos Albacete nos preocupa seriamente que quienes administran los recursos públicos no tengan un nivel de exigencia un poco más elevado a la hora de que los responsables de instalaciones públicas rindan cuentas sobre la gestión y los resultados con un mínimo de rigor. El informe que se nos presentó es una tomadura de pelo y un insulto a la inteligencia porque carece de la más mínima credibilidad.

“Nos gustaría saber cómo saben que asisten 20.000 personas al circuito si no se paga entrada. Que nos expliquen cómo controlan el acceso de las personas y por qué no se cobra nada”.

En definitiva, el Grupo municipal de Ganemos Albacete considera que las instituciones no pueden seguir dedicando todos los años 950.000 euros a mantener una instalación de dudosa rentabilidad social, motivo por el que ha planteado incluso la posibilidad de sacar a concurso la explotación del Circuito para que en lugar de que nos cueste dinero las instituciones reciban un canon, como ocurre por ejemplo con la Plaza de Toros.