[Opinión] Sentido común

Escrito por: Hugo Piña

martes, 25.04.2017

El sentido común es algo que no se vende en las farmacias ni se aprende en las facultades universitarias. Y por lo visto, eso es algo que de unas fechas a esta parte le está faltando a un Albacete Balompié que, o mucho me equivoco o lleva camino de darse un ‘hostión’ de dimensiones bíblicas. Ya sea que dicha dosis le falta a su entrenador, ya sea que les faltan a los jugadores o ya sea que le faltan a la dirección de un histórico que veía en esta temporada la óptima para salir reforzado de una situación crítica.

Ya ni los elementos están ayudando a un sentido, el común del Albacete que, bajo mi humilde juicio, está perdido, desnortado y hasta en según qué momentos del día, desmoralizado. Y digo el último término de desmoralizado porque el equipo es el líder del grupo y que se encuentra, encima, amparado bajo una sombra, más allá de gustos personales, de profesionales de envidiable currículum y capacidades.

Pese a todo ello, y con lo sencillo que parece (desde fuera) ponerle sentido común a una situación que va camino de ser histórica (y para mal), lo cierto es que nos seguimos dando de bruces. No hay ni reacción. Ni tan siquiera parece haber orgullo propio por parte de una plantilla que otrora ha demostrado, con este mismo escudo, saber hacer las cosas tremendamente bien. Y, sin embargo, seguimos postrados en el mismo alambre del “somos líderes” cual madridista rebate desde tiempos inmemoriales el “tenemos 11 Champions”. Precisamente no beneficia esto a un equipo que debe reaccionar ya si quiere aspirar a su gran objetivo: el ascenso.

Y para conseguirlo, no aspiro a otra cosa más que al uso del sentido común por parte de todos, ya sea en el campo de la animación y su afición, ya sea por parte de la plantilla y su entrenador o ya sea por la dirección. En pos de salvaguardar la integridad de nuestro equipo, toda ayuda siempre será bien recibida, y más en momentos como estos, en los que las nubes comienzan a cernirse y el histórico Albacete necesita, ahora más que nunca, de absolutamente todos los sentidos para enfatizar con ello el único camino posible, el del ascenso a Segunda A.