Historia y senderismo en una nueva cita deportiva en Villarrobledo

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lunes, 23.04.2018

Este domingo, día 22 de abril, tuvo lugar una nueva ruta de senderismo, dentro de la actividad que organiza la Diputación Provincial de Albacete para promocionar tanto el turismo, como el deporte y la cultura de nuestros pueblos. Un itinerario que atraviesa un espacio con vestigios humanos desde el paleolítico inferior y ofrece un paisaje de transición entre la llanura Manchega y el Campo de Montiel, con suaves ondulaciones del terreno, terrazas y meandros modulados por los cauces del río Córcoles y el río Sotuélamos

Forma parte de uno de los Lugares de Importancia Comunitaria de la Red Natura 2000, por la localización de determinados endemismos y la presencia de aves protegidas, como las avutardas y el búho real.

La prueba se denominaba “Ruta de la Pasadilla_LosCastellones” con una dificultad técnica baja, un recorrido circular, de alrededor de 16 kilómetros de distancia, y aproximadamente cinco horas de duración, una ruta con gran importancia natural, paisajística y arqueológica.

Hubo que desplazarse en autobús hasta la aldea de La Pasadilla, conjunto de casas de labranza y otras dependencias asociadas a las labores agrícolas y ganadera, lugar de comienzo de la actividad, algo más tarde de las 9 de la mañana, desde este lugar con un largo recorrido histórico y un importante núcleo de población en época medieval. Se conservan restos de construcciones e infraestructuras época romana.

Desde aquí, tomaron el Camino Viejo de El Bonillo, que recorre una zona de matorral, rastrojos y barbechos, hábitat ideal para avutardas, el ave esteparia más grande de Europa. Pueden avistarse en agrupaciones más o menos numerosas.

Atravesaron el cauce del Córcoles por un puente con restos de una calzada romana para llegar al molino harinero de agua de La Pasadilla, que forma parte del patrimonio histórico hidráulico de Castilla La Mancha. Su estructura actual corresponde al siglo XVIII, pero hay indicios que apuntan a una existencia anterior. Esta estructura está basada en una captación de agua subálvea, trazada entre dos pozos comunicados entre sí por una galería subterránea transversal al río y se completa con una zanja cimbrada o “calzadito” que corre paralela a la margen derecha del río y desemboca en sucesivos aljibes o “cimbres”.

El Córcoles es el principal afluente del río Záncara, en la cabecera del Guadiana, y el río Sotuélamos es el principal afluente del Córcoles. A partir de su unión verdaderamente el Córcoles adquiere naturaleza de río por el aporte de caudal.

El sendero transcurre paralelo a estas márgenes y atraviesa zonas de cultivo de cereal de secano, parcelas de viñedo en espaldera y almendros, que ocupan terrazas y meandros formados por ambos ríos. El paisaje se completa con especies vegetales asociadas a los cauces de los ríos y el matorral va dando paso a zonas de monte mediterráneo con encinas, coscojas y especies aromáticas, hábitat ideal para perdiz roja, conejo, liebre, zorro, jabalí…

El ayuntamiento de Villarrobledo cada vez sorprende más con lo que prepara para almorzar, y en esta ocasión hubo gachas, huevos con ajetes a la lumbre, chistorra, lomo y panceta a la plancha, todo regado con los ricos vinos del municipio.

En la lengua entre ambos ríos se localiza El Villar, coetáneo a los poblados ibéricos de la zona. Asentamiento importante en época romana y con abundante población en el bajo imperio romano. Se mantuvo desde el Bronce hasta época islámica.

En época Ibérica y dominio romano la vega del Córcolesfue uno de los enclaves más importantes para el asentamiento de poblados y villas.

A partir de aquí el trazado del sendero adquiere una mayor complicación con subidas y bajadas de pequeñas lomas y pequeños quebrados. El recorrido discurre por sendas estrechas poco transitadas y que obligan a caminar en fila india. La vegetación se hace más abundante y con mayor presencia de encinas.

Paraje al que le da nombre otra aldea similar a la de La Pasadilla y que está situada sobre un pequeño cerro. A esta zona se accede desde la margen izquierda del río Córcolesa través de un puente romano, Puente de Los Catellones, que le daba servicio a la aldea en época romana. El puente conserva parte de su estructura original: obra de mampostería con calzada de cantos, que actualmente está reforzada con vigas, que se dispone sobre el lecho del río Córcoles.

Desde Los Castellones se divisa un paisaje de terrazas naturales y dominadas por lomas y pequeños cerros, desde los que distinguen algunas morras propias del “Bronce Manchego” y algún poblado fortificado de época Ibérica. En el recorrido también se localizan abrigos naturales y cuevas utilizadas desde el paleolítico, lugar de donde vimos salir un impresionante Búho real, poco habituado a tanta presencia humana.

El paisaje está definido por parcelas de cultivo de secano, vid y monte bajo salpicado por núcleos de encinas y otras especies arbóreas. Es zona de anidamiento y descansadero de una familia de Búhos reales, especie protegida.

Desde aquí ya solo restaba volver al punto de partida en la aldea de La Pasadilla, donde les esperaba el autobús para llevarlos al restaurante Viñedos y Bodegas El Castillo, donde entre varios manjares les esperaba un exquisito plato de arroz con bogavante. Después visitaron la Iglesia de San Blas del Municipio.

Otro éxito cosechado con las rutas de senderismo que pudieron disfrutar con sol los cincuenta participantes de esta actividad, que tanto éxito ha tenido en anteriores ediciones, organizado por la diputación Provincial de Albacete.

Las siguientes salidas volverán a ser dos, una el sábado 28, con la prueba “Peñas de San Pedro_Roble”, de dificultad baja y 18 km de distancia; y otra el domingo día 29 de abril en Madrigueras denominada “Ruta de El Torcío”, circular, de 18 kilómetros de distancia, dificultad media y unas cinco horas de duración.