Escrito por: Bienvenido Picazo

miércoles, 08.08.2018

Lo bueno que tiene enfrentarse a dos favoritos de entrada, a la sazón el Deportivo de La Coruña y la UD Las Palmas, es que si se pierden los partidos, no ha lugar para ningún drama; pero si se ganan, se refuerza la autoestima e inmediatamente se instala la tranquilidad necesaria para afrontar exámenes sucesivos.

No sólo estos dos gallitos -y otros seis o siete más-, son favoritos por historia, presupuesto, número de socios, sino, es que además son recién descendidos y sus aspiraciones no son otras que las de volver a la elite.

Así que, agradezcamos al destino este guiño del azar y dejémosles a ellos las prisas.

Nosotros, debemos seguir pensando en llegar al primer puerto serio de montaña con las expectativas intactas. Navidad, ese es el primer gran parcial.

Por todos los mentideros, se afirma de forma abierta que este año la Segunda va a ser más dura que de costumbre. Nuestro Albacete Balompié, lleva una pretemporada sin sobresaltos, aunque podría haber ido mejor en lo que a resultados se refiere (comienza ¡ay!, a resultar endémica y desesperante nuestra falta de gol). Además, el mercado todavía está abierto, puede haber muchas variaciones y la mayoría de los equipos está sin pulir, sin completar siquiera. El Alba, creo que tiene la base de la plantilla más que conjuntada desde hace semanas.

De la dureza o la facilidad del resto del calendario, sólo el tiempo lo calibrará. Hacer cuentas a priori, no sirve nada más que para presionarnos. El mayor enemigo de uno mismo, suele ser uno mismo.

Recemos porque las lesiones, las sanciones y los árbitros no nos sean esquivos.