Por fin nos dimos un atracón (Opinión)

Escrito por: Bienvenido Picazo

lunes, 25.03.2019

Ya tocaba vivir un partido con algo de sosiego. Aunque hasta el segundo gol rondó algo de intranquilidad, al final resultó que nos dimos un atracón. La afición ya se lo merecía, se merecía un partido así y un viaje de vuelta tranquilo escuchando música, admirando el paisaje, haciendo risas y pensando en el próximo envite sin tener que lamentar las ocasiones perdidas, los desafueros arbitrales, el mal de ojo y la leche derramada.

Hemos recuperado algo del terreno perdido en febrero y ya estamos de vuelta. El Albacete ha vuelto justo cuando quedan diez jornadas. Ya no es tiempo para plañideras, es la hora de los valientes.

Me resulta curioso que cuando todos los jugadores se implican a fondo, el resultado suele ser positivo. ¿Por qué?. Misterios de la vida y del fútbol. Veo a todos los jugadores ya ¡por fin! recuperados para la causa y pensando en la zanahoria final, se ha recuperado definitivamente el espíritu de la primera vuelta. Ahora nos queda darle al Belmonte el brillo del que ha adolecido toda la temporada. El sprint final va a ser de órdago.

Lugo nos sorprendió con un tiempo espectacular y nos pudimos dar un buen fin de semana, la victoria nos predispuso para verlo todo de color de rosa y el viaje de vuelta se nos hizo hasta corto. Linda ciudad, gentes agradables, más allá de los cabestros habituales que habitan en todos los campos. ¿Por qué algunos indocumentados siguen yendo al fútbol a desahogar sus miserias?. ¿Por qué no se van a dar largos paseos por el monte buscando setas o gnomos?. Sea, dejémoslos estar, pero que estén lejos.

Aunque Nadal salvó un par de posibilidades de empate para los lucenses, no vi peligrar la victoria, hay mucha diferencia entre los dos conjuntos. Cuando el Alba sacaba su poderío daba gloria ver sus despliegues y sólo el relajo impidió un resultado escandaloso. Tampoco hay que cebarse, siempre hay que respetar al rival, pero como llevábamos unos berrinches tremendos, el pueblo necesitaba resarcirse y qué mejor forma que hacerlo con una goleada. Visto lo visto, convengamos que el puñetazo sobre la mesa que veníamos reclamando, se produjo en el Anxo Carro. Golazos, predisposición, recuperación de sensaciones extraviadas, sonrisas y altitud de miras.

Don Luis Miguel sacó el tiralíneas y dio todo un curso táctico, el comportamiento de los nuestros hizo el resto. El Lugo pronto se vio impotente y lo que tanto nos costó en casa contra los rojiblancos, en Galicia pareció un paseo militar.

Lo de Lugo ya es historia, ahora toca pensar en el presente y el futuro más inmediato. Empezar otra vez de cero, pensar que tenemos otra final y olvidarnos de lo buenos y lo altos y lo rubios que somos y los ojos tan azules que tenemos. Todos los equipos salen a morder y nadie mira la clasificación, la prueba está en que la categoría no está defraudando a nadie y semana a semana hay que ponerse el mono de trabajo y correr. Al que baja un momento los brazos, cualquiera le parte la cara. De ahí que la actitud sea tan vital. Más que trabajo de los técnicos, ahora le toca el turno a los psicólogos. Estamos muy cerca de coronar una temporada cum laude.