El Villarrobledo necesita un bardo (Opinión)

Escrito por: Bienvenido Picazo

sábado, 13.07.2019

Del mismo modo que cuando se presentó Curro Romero y alguien escribió aquello de «Viene pidiendo poetas», el CP Villarrobledo necesita que un cronista, local o forastero, pero conocedor de los entresijos de esta maravillosa odisea, relate en un libro la gesta que ha protagonizado el conjunto vinatero. Después de tantos fracasos, de tantas intentonas baldías, de tantas idas y venidas y ramas caídas, justo cuando la cosa estaba más delicada y difícil, el Villarrobledo ha conseguido dar el salto y todo parece que ha sido fruto de cualquier cosa, menos de la casualidad.

Esto apunta a que se ha hecho de la necesidad virtud, puesto que no cabía caer más abajo y, en el río revuelto y seco, un puñado de gentes de bien, con carácter, sapiencia y agallas, se echaron el proyecto a los hombros y, prácticamente entre cuatro amiguetes, han protagonizado un maravilloso «happy end«.

Ahora empieza el vértigo, porque a poco se hagan las cosas bien, mutatis mutandis, como se vienen haciendo desde hace unos meses, este equipo tiene pinta de acomodarse en 2ª B, que si para nuestro Albacete Balompié es un cementerio, para el «Villa», puede ser una manera como otra cualquiera de reverdecer viejos laureles y darle lustre a una ciudad, que si bien no es Chicago (ni falta que hace), tampoco es una pedanía, vaya, que tiene capacidad más que suficiente para consolidar al club y ¿por qué no?, dar algunos pasitos hacia posiciones más señeras.

Si el La Roda estuvo no hace tanto (y volverá), durante seis temporadasconsecutivas en la categoría de bronce, los villarrobledenses, se pueden plantear igualar y superar este hito. Aquello también tuvo tela, y es que la provincia está necesitada de que el éxito que nos ocupa sea pronto emulado tanto por el propio La Roda, como por ¡ay!, el Almansa y el Hellín, localidades con empaque y capacidadde sobra para mantener con holgura a sus equipos, sin embargo languidecen en un extraño sueño, que sospechosamente dura demasiado.

En espera de nuevos comensales que se añadan al festín, festejemos el nuevo éxito del fútbol albaceteño y deseemos no sea flor de un día.

Con casi treinta mil habitantes, Villarrobledo y su comarca, están llamados a estabilizar a su flamante equipo de fútbol y el comercio local tiene una ocasión estupenda para darse publicidad y recordar, a quien quiera escucharlo, que cuando las cosas se hacen bien, el éxito está casi asegurado, siempre claro, hay que contar con el factor suerte, pero a la suerte conviene mimarla trabajando y estudiando.

Yo, por mi parte, llevo unos días festejando con buen vino del pueblo que dentro de nada va a dar que hablar sólo por su buen rendimiento en el césped.