Nubarrones (Opinión)

Escrito por: Bienvenido Picazo

martes, 03.09.2019

Del Cantábrico hemos vuelto con otro correctivo, no en lo estadístico, pero sí en el ánimo general. El Albacete Balompié no parece dar signos de estar en modo competitivo, la impresión que trasluce es que todavía se está en pretemporada y convendría ponerse ya el mono.

Que hemos perdido calidad no se le escapa a nadie, pero lo que extraña es la falta de testosterona y la abulia que aplasta al grupo. La calidad no necesariamente lleva al éxito, del mismo modo que la garra no es sinónimo de tuercebotas y patadón a la olla a ver qué pasa.

 

Estamos pagando, creo, el fiasco pasado, y observo que cuesta orillarlo en la vitrina de la Historia. Está tan presente, que creo nos está agarrotando e impidiendo pasar página. Esta labor pertenece más al ámbito psicológico que al táctico, pero si le diésemos una vuelta a la pizarra, tampoco estaría de más.

 

Tres partidos y no haber visto puerta es un dato inequívoco sumamente preocupante, si jugando con la elegancia del año pasado, nos costaba Dios y ayuda marcar, ahora con otros elementos menos finos sobre el césped, el resultado no puede ser otro. Quizá don Luis Miguel sepa llevar equipos de finos estilistas, pero lecueste más hacerlo con gladiadores.

Me ofusco intentando ver a qué jugamos porque a estas horas, todavía no sé dónde estamos, ni quiénes somos, ni adónde queremos llegar a parar. Más que la calidad del plantel, creo que lo más importante es saber qué se pretende, porque la obcecación por unas ideas no puede hacer abstracción de saber con qué elementos se cuenta para aplicarlas.

 

A lo peor estamos todos demasiado impacientes y es cuestión de tiempo que las cosas vuelvan a su cauce, pero como no vemos señales nos aferramos al forofismo y eso, no me parece a mí que sea demasiado positivo. El aficionado necesita, como Santo Tomás, tocar para creer. Somos pacientes y confiados, pero algunas señales nos ayudarían a apaciguar la ansiedad y no creo que en nuestro ánimo anide la idea de luchar por el ascenso, simplemente queremos ser un equipo de fútbol, y a apenas, unos días antes de la Feria no lo parecemos.

 

Me enerva jugar en estadios históricos y dar la imagen tan triste que estamos dejando, el que más y el que menos toma nota y, en breve, todos los rivales se nos pueden subir a las barbas y perdernos el respeto. Aunque los primeros que deberían recuperar el “Espíritu Catali” son los que se visten de corto y quienes los escogen.