Manu Fuster en el Albacete – Cádiz. MATEOVILLALBA

Reedición. «Pesadilla antes de navidad» (0-1)

Escrito por: Hugo Piña

sábado, 21.12.2019

Nueva derrota del Albacete en el Carlos Belmonte (0-1). Más de lo mismo para un equipo sin ideas ni argumentos sólidos en ataque. Qasmi en el 70′ arruinó la navidad para los de Luis Miguel Ramis, que junto a Mauro Pérez habrán de rearmar un equipo con idea pero sin claros argumentos. Con el traspiés llegó la enésima pesadilla… antes de navidad. 

Último partido del año en el Carlos Belmonte. Última cita del 2019 de un Albacete Balompié que recibía en casa al Elche de Pacheta en pos de mejorar una irregularidad palpable sobre todo en el coliseo albacetista. Tras los acontecimientos acaecidos en Vallecas con Zozulia, fue el partido en el que el delantero ucraniano pudo comprobar el amor de una afición que coreó a su futbolista franquicia en todo momento.

La primera parte en el Belmonte acogió a dos equipos timoratos en lo referente al gol. Falta de llegada en Albacete y Elche en lo que fueron los primeros cuarenta y cinco minutos de un insulso partido, donde los de Ramis no quisieron y los de Pacheta no pudieron. Ni con dos referencias conseguía el cuadro manchego enfatizar su hambre de gol en una temporada atípica en todos los sentidos.

Zozulia y Karim ofrecieron dos lanzamientos desde la frontal que generaron algo de peligro sobre el marco de San Román. Pero ni con esas se veía un equipo generador, alegre y dinámico. Todo lo contrario. Costaba horrores llegar al área rival y cuando se hacía, era sin peligro. Faltaba mordiente y sobraban metros de campo. Mientras tanto el Elche dibujó su partido con Fidel y Josan en las bandas, pero sobre todo Gonzalo Villar en la medular. Hacían daño y en más de una acción pudieron apuntillar a un Albacete que estaba volviendo a desesperar a su afición.

La primera parte concluyó con la mejor acción de peligro para el Alba. Un balón servido desde la banda al segundo palo fue golpeado por Fran García, quien con gran inteligencia cruzaba en exceso el balón. Fue la mejor oportunidad para un equipo que no estaba cómodo en la fase ofensiva ante un rival que sí lo estaba pero al que también le costaba.

La segunda parte prosiguió de igual forma y con las mismas intenciones en ambos bandos. El Alba no podía y el Elche apenas lo intentaba en un duelo donde la intensidad era alta pero donde la claridad de ideas también era palpable. Nada de nada en cuanto a generación ofensiva salvo los disparos puntuales de Pedro Sánchez desde la frontal.

No conseguian desarbolar las manidas defensas unos atacantes que en el lado manchego se veía sin punch ni dinamismo. Desesperación palpable de la parroquia manchega que una vez más veía como su equipo no ofrecía algo para ganar el partido. Y cuando tuvo lugar la mejor ocasión para el Albacete, como en una pesadilla, a la contra llegó el gol del Elche. Qasmi a la contra sentenciaba a los de Ramis en un partido donde solo había alma.

Manu Fuster y Álvaro Jiménez entraron en el verde para intentar cambiar un partido y una tarde desapacible en algo más de la época. Pero ni por esas. Le falta y mucho al equipo de Ramis, como consistencia, regularidad y una alarmante falta de gol. La fortuna es que enero está a la vuelta y que la dirección deportiva podrá rearmar un equipo con idea pero sin argumentos.