Los calvos del Alba (VI): Valerio, el portero al que le gustan los duelos al sol

Escrito por: Rafa Gil

domingo, 24.05.2020

Seguimos con nuestra colección y esta semana nos detenemos en un portero que vivió una breve estancia en tierras manchegas pero que al que se le guarda buen recuerdo. Un clásico de la Segunda División que era un muro atrás. Un hombre cuya extraordinaria vigencia bajo los palos le ha servido para vivir mil y una experiencias. Joaquín Enrique Valerio, un guardameta que llegó en su plenitud al Almería y como si se tratara de un actor de un espagueti western se ha instalado en el Sureste español donde vive una tranquila vida junto a los suyos.

Nacido en Badalona hace 43 años, este portero se inició en el mundo del fútbol en la famosa escuela catalana del Damm. Tuvo sus escarceos con el FC Barcelona, pero el que realmente apostó por él fue el Real Madrid que se lo trajo para la Fábrica con tan solo 17 años. En el Castilla estuvo dos campañas en Segunda División en la que disputó una buena cantidad de partidos, compartió vestuario con míticos como Dani García Lara, Raúl González Blanco o con el ex entrenador del Albacete Antonio Gómez. En aquella etapa, el filial madridista estaba en manos del laureado Rafa Benítez.

Su primera experiencia en un equipo de primer nivel fue en el Hércules en el año 95. Temporada donde los alicantinos estuvieron a gran nivel,  llegaron hasta octavos de final en la Copa del Rey y les mandó a casa el FC Barcelona, los culés no pudieron ganar en el Rico Pérez y tuvieron que rematar la eliminatoria en el Camp Nou. Además, consiguieron el ascenso a Primera División con jornadas de antelación en un curso magistral. Sin embargo, la participación de Valerio no fue mucha. Al año siguiente, es cuando se produjo su llegada a Albacete, fruto de una nueva cesión del Real Madrid a uno de los conjuntos con más posibilidades en aquellos momentos en la categoría de plata.

El Albacete precisamente había apostado por Manolo Jiménez, el entrenador que había ascendido a los herculanos a la Liga de la Estrellas, y decidió contar de nuevo con Valerio en esta aventura en el Carlos Belmonte. A pesar de que el entrenador extremeño no duró mucho  ya que en la jornada 6 le sustituyó Mariano García Remón, Valerio fue titular indiscutible y fue uno de los causantes de que aquella temporada se rozara la Primera División. Al final de la misma, el Alba acabó 4º clasificado y haciendo una gran segunda vuelta. Una actuación fabulosa que le catapultó a Primera División.

A pesar de estar 4 años en el Betis, en el club de Ruiz de Lopera apenas tuvo continuidad ni en la máxima categoría ni en Segunda. Estando siempre a la sombra de Toni Prats. Su siguiente parada fue el Elche, donde sí que fue el dueño de la portería del Martínez Valero. Después en el Tenerife tuvo que pelear el puesto con Sergio Aragoneses, al final el cancerbero chicharrero le ganó la partida.

Sin embargo, a la edad de 30 años llegó al destino donde realmente fue determinante. En el Almería ha sido héroe y uno de los porteros míticos en la etapa reciente del club. Cuatro temporadas mágicas que culminaron con aquel ascenso espectacular de la mano de Unai Émery. No obstante en esos momentos finales en su estancia en los Juegos del Mediterráneo, el holandés Westerveld le quitó el puesto, lo que propició que dejara el club andaluz. Tampoco se marchó muy lejos, porque tras un breve paréntesis de nuevo en el Elche, el Poli Ejido fue su hogar durante 3 campañas antes de retirarse. Un periplo muy difícil para el portero catalán ya que allí vivió duros momentos como impagos o la descomposición del aquel club en la 2ºB.

De él poco sabemos en la actualidad, tenemos constancia  en que está afincado en Almería. Ha tenido algún escarceo con los banquillos, y fue preparador de porteros en las categorías inferiores de la UD Almería hace algunas temporadas.