Escrito por: 5 más el descuento
sábado, 28.11.2020
Con rotunda claridad, Aritz se dirigió hoy a la afición del Alba. Una afición hundida ante la complicada situación de un equipo que iniciará el partido ante el Tenerife con la odiosa losa de ser el último clasificado de la categoría. “Se junta que la gente no va al campo, que el equipo no le da ni una alegría hace mucho; se junta que se ponen delante del televisor y no somos capaces de levantarles una sonrisa, se junta que la sociedad y el país están como están….Y la afición es normal que esté desencantada conmigo, los jugadores, con el club. Si fuese aficionado del Albacete estaría preocupado y triste. Lo único que puedo decirles es que no vamos a dejar de trabajar y que estamos día a día poniendo toda nuestra capacidad para sacar esto adelante. Doy todo lo que tengo. Yo no sé qué más hacer para conseguirlo. Pido a la afición que no nos abandone”, dijo un entrenador que asumió la autoría del complicado momento deportivo de la entidad.
“Todos estamos juntos en esto. La responsabilidad es de todos. El primero, yo. Soy el responsable de que el equipo no gane partidos, no Mauro o la dirección deportiva. Que no se gane los partidos es mi responsabilidad. El único responsable soy yo”, indicó. Y tampoco esquivó su peso en la incómoda situación que viven sus delanteros: un gol y de penalti lleva Zozulia y Ortuño todavía no se ha estrenado. “Es mi responsabilidad que no marquen goles Ortuño y Zozulia. No les llegan balones. Las rachas van y vienen. Cargar las tintas de que no marcan sobre ellos sería injusto para ellos y los responsables somos yo y el equipo. Si no les llevamos balones y no acaban de finalizar jugadas, qué vamos a pedirles. Si Ortuño fallara seis goles delante del portero podríamos preguntarle qué pasa. El equipo tendrá que hacer más para ellos”.
La situación es crítica, pero la confianza es máxima. “Con la dirección deportiva hablo todos los días. Con el Consejero Delegado, Víctor Varela, también hablo asiduamente. Las conversaciones son constantes”. Y es que cuerpo técnico, jugadores, propietarios, dirección deportiva, empleados… todo el club pone de su parte para cambiar una situación a la que abocan situaciones a corregir. “No ganamos. Cuando no ganas partidos analizas por qué no ganas partidos. Echas un vistazo y tiras de memoria de los últimos partidos y te das cuenta de que en todos cometes errores, y así no se puede ganar. Si no tienes muchos aciertos y en cada partido tienes uno o dos errores, pierdes”.
Los penaltis en contra están lastrando al equipo. “Cuando los penaltis son repetitivos o iguales puedes buscar solución, pero cuando cambian de situación y de jugador… De los últimos cinco goles recibidos, tres han sido de penalti. Son errores nuestros. El Logroñés estuvo poco o nada cerca o dentro de nuestra área y no podemos darle esa ventaja de cometer un penalti. Tenemos que cortarlo”. “No es impotencia. Es frustración. Preparas el partido. Sales convencido de que va a ser el día. Y sin que pase nada, se desmorona todo. Remontar partidos en la situación que estamos no es fácil. Entiendo que te puedan marcar gol si te acosan. Pero en partidos que no suceda nada ponerte por detrás no puedes permitírtelo. Eso te penaliza”, agregó el técnico.
El técnico, que lleva jugado el partido ante el Tenerife “unas 500 veces en mi cabeza”, reconoce que la atmósfera alrededor del equipo no es la mejor. “El equipo lleva año y medio en dinámica mala. Parece que todo sale mal. Y esa sensación es difícil de quitártela. Y no solo es de los jugadores. Esa dinámica está en torno al equipo. Tenemos que eliminarlo. No es fácil quitarlo. Pero es la única manera. No podemos afrontar el partido ante el Tenerife con la carta de que algo nos va a pasar. Es una situación complicada pero debemos afrontarla y tenemos la capacidad de hacer que cambie. Es una cuestión que entre todos tenemos que cambiar”.
Pese a los malos resultados, lo cierto es que una victoria ante el Tenerife podría sacar de la zona de descenso al Alba. “Es una Liga con muchas diferencias. Está comprimida la parte de abajo. Nosotros somos uno de esos equipos incapaces de conseguir victorias. Debemos pelear por conseguir esa fiabilidad o victorias que nos hagan salir de esa quema. Tarde o temprano la gente va a sumar puntos. Y tenemos que empezar a sumar desde mañana. No podemos esperar más”.
El rival será un Tenerife que no llega en un momento bueno tampoco. “Es una realidad. No pongo excusas cuando digo que veníamos jugando ante equipos en su mejor momento. Ante el Tenerife la situación es distinta, vienen con problemas. En Almería perdió haciendo un buen partido. Son un equipo diferente. No sé el tiempo que tendrá Ramis para meter sus ideas. Debemos estar preparados. Tenemos que demostrar que queremos salir de ahí abajo”.
«Tengo frustración porque preparamos la semana con los jugadores y pensamos que va a ser el día, pones la ilusión y sin que pase nada se desmorona todo. No es fácil, tenemos el ejemplo del otro día que en el minuto 7 te hacen penalti y te marcan. No podemos permitírnoslo», comentaba el vasco de Barakaldo.
Por último sentenció en rueda de prensa de este sábado: «Si el equipo no sale de ahí abajo no sé hacer más. Hago todo lo que puedo, la afición no tiene que abandonarnos».
