Lo que va de un minuto a otro (Opinión)

Escrito por: Bienvenido Picazo

martes, 22.02.2022

Si el partido hubiese terminado con victoria, tengo para mí que las crónicas serían menos trágicas.

Lamento volver a tener que representar el papel de Pepito Grillo o toca narices (o cosas peores) oficioso de buena parte de la grey albacetista, pero alguien tendrá que poner sordina a la visión tan pesimista en la que, para mi gusto, nos estamos recreando en exceso.

Sí, sí, ya sé que estamos fallando estrepitosamente frente al gol, que a veces, más que jugar, simplemente deambulamos por los céspedes, y un sinfín de situaciones estrambóticas más. Ciertamente no somos los mejores del mundo, ni siquiera los mejores de la categoría, pero, con todas nuestras deficiencias, seguimos en la brecha. Por ello, creo que deberíamos ser más cautos y pacientes, porque tal pareciere que estamos desahuciados, que todo es inútil y que ya hemos tirado la temporada por la borda.

Contra el FC Barcelona “B”, se hizo un gran esfuerzo para remontar, se consiguió y se malogro; pero qué diferentes seríannuestras caras si nos hubiésemos traído los tres puntos, digo con idéntico partido, pero sumando de tres. Es una mera cuestión de detalles y como no le damos continuidad a nuestros momentos felices, aquellos nos matan.

Yo sigo viendo motivos para la esperanza, sigo pensando que estamos merodeando el descubrimiento de la fórmula magistral, estamos cada vez más cerca de encontrar la piedra filosofal. Proclamo que podemos mejorar y no sólo podemos, ¡debemos mejorar!, mas el hecho de haber remontado, demuestra que los muchachos tienen fe en su calidad y en su entrenador. La pena, claro, es que no terminamos de controlar los biorritmos y, al refugiarnos en tablas, acostumbrados como estamos a llevar la manija, nos desarbolamos y nos llevamos más berrinches de la cuenta.

Si hacemos abstracción de los detalles, veo al Albacete Balompié con cuajo suficiente para volver a Segunda. No es buena idea seguir lamentando los puntos que, tontamente, hemos dejado escapar, quedémonos con la idea de que queda un mundo. Además, salvo los muy optimistas, la mayor parte de entre los nuestros, sabía que esto no iba a ser un paseo militar.

Sólo los grandes salen de las encrucijadas y, ahora que estamos atravesando un pasaje gris, es cuando tenemos que justificar nuestra categoría. No me gusta apostar, pero si tuviese que hacerlo, lo haría a lo grande. Ya no hay rastro de aquellos partidos lamentables del principio, estamos con cierta irregular regularidad, pero somos bastante fiables. Lo peor son los detalles y el pase a la red, que, por no ser muy cruel, digo que no lo ejecutamos con pericia. En este apartado, el entrenador tiene poco margen, de hecho, producimos mucho, pero le sacamos un magro rendimiento.

Contra los teóricamente débiles, sufrimos una barbaridad, este es otro apartado que debemos mejorar, ya que somos, siempre teóricamente, más fuertes que casi todos los demás.

Alegremos la cara, que tal como se nos puso el partido, muchos de nosotros habríamos firmado el empate en el descanso.