Escrito por: Rodrigo Quero
domingo, 04.06.2023
El Estadio Carlos Belmonte fue testigo de una explosión de indignación por parte de la afición del Albacete tras un pésimo arbitraje de Busquets Ferrer en el partido de semifinales del playoff de ascenso contra el Levante. El descontento de los aficionados fue palpable, y corearon enérgicamente: «¡El Levante juega con 12!».
El punto de inflexión se dio cuando el equipo granota anotó su segundo gol en posición de fuera de juego. La frustración se apoderó de los seguidores locales al ver cómo el árbitro y sus asistentes no percibían esta evidente infracción. Esta situación se sumó a una serie de decisiones que parecían beneficiar constantemente al Levante a lo largo del encuentro.
La indignación de la afición fue tal que el grito resonó en todo el estadio. «El Levante juega con 12» se convirtió en el mantra de una afición descontenta que sentía que las decisiones arbitrales estaban condicionando el desarrollo del partido y perjudicando al Albacete.
El arbitraje de Busquets Ferrer dejó mucho que desear. El equipo local se sintió agraviado por las acciones que no fueron sancionadas a favor del Albacete. Además, la falta de rigor en la aplicación del tiempo añadido generó aún más descontento.
