Escrito por: 5 más el descuento

domingo, 30.11.2014

Alegría generalizada entre los aficionados de un Alba que esta tarde en Barcelona han demostrado el significado de la palabra «oficio». Pese a ponerse por detrás en el marcador, los de Sampedro han sido capaces de multiplicar por mucho el número de ocasiones locales, y era increíble que el resultado al descanso fuera de 1-0. César Díaz ha sido el autor de la mayor parte de éstas, pero parecía que hoy no quería entrar y el Barça estaba ganando un partido de forma totalmente injustificada.

Con la llegada del diluvio, el partido empezó a cambiar de imagen. Apenas se podía jugar y aunque el Barcelona tuvo la sentencia en un par de acciones donde pudieron plantarse solos delante de Alberto, el agua retuvo la pelota. Con la entrada al terreno de juego de Keko, el Alba ganó en habilidad e inteligencia. Él solo se fabricó el gol del empate y también intervino en la jugada del 1-2. Ese segundo tanto fue obra de Samu, otro de los cambios de un hoy muy hábil Luis César Sampedro.