Alcalá del Júcar disfrutó del senderismo provincial

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lunes, 30.10.2017

Este domingo, día 29 de octubre, tuvo lugar la trigésima primera de las rutas que la Diputación Provincial de Albacete organiza dentro de la IV Edición de Rutas de Senderismo. Esta vez, los participantes se desplazaron a Alcalá del Júcar, un precioso pueblo en plena comarca de la Manchuela.
La ruta se denominaba “Entre Barrancos”, con una dificultad técnica media-alta, un recorrido circular que comenzaba en la Playeta de Alcalá del Júcar y terminaba en el mismo pueblo, de casi 15 kilómetros, y aproximadamente cinco horas de duración.
La actividad comenzaba a las 9 de la mañana, desde la Playeta, dentro del pueblo de Alcalá del Júcar, junto al río que lo atraviesa y le da nombre, una playa formada a orillas del rio Júcar, una zona navegable, en su tramo final por nuestra comunidad antes de entrar a tierras valencianas donde desemboca. Ahora con el otoño y los árboles que la rodean crea una imagen preciosa, una de tantas que se vería durante el recorrido.
Aquí el río traza una garganta que dibuja un sinuoso paso que constituye uno de los principales atractivos de Alcalá de Júcar y que condiciona la disposición de las casas, que trepan por las laderas. Aprovechando los colores que nos deja el otoño, iniciaron la marcha dirección Tolosa, la más pequeña de las pedanías que tiene Alcalá del Júcar, siguiendo el transcurso del río Júcar, sus aguas les conducen a través de curvas y rincones hasta un lugar donde se remansan, el río se ensancha y en la ladera de la montaña aparece repentinamente la aldea de Tolosa, a unos 5 kilómetros del núcleo principal de Alcalá del Júcar.
Para cualquier viajero que llega a Alcalá del Júcar, Tolosa debería ser un lugar de visita obligada, un lugar donde se respira tranquilidad. Es la única pedanía bañada por el río Júcar donde se pueden hacer actividades acuáticas con alguna de las empresas que hay en esta localidad.
El cielo estaba cubierto, cosa de agradecer por la subida que esperaba a los senderistas, un zigzagueante sendero con bastante inclinación por lo que la precaución era máxima, podían ir observando las pocas casas que componen Tolosa, a orillas del río, dos kilómetros que les conducirían hasta la pedanía de La Gila, una pequeña pedanía de Alcalá, situada a unos seis kilómetros de la localidad, un pequeño pueblo con muy pocos habitantes pero con gran tránsito de visitantes amantes de la tranquilidad y la naturaleza.
Aquí, y por cortesía del Ayuntamiento, tomaron unas ricas tortas de chorizo, panceta y sardinas para reponer fuerzas y luego visitar el antiguo lavadero de esta aldea. La Gila está ubicada en lo alto de una meseta, a la misma altura que Tolosa, con la excepción de que Tolosa se ubica en la ladera de la montaña. Continuaron después el recorrido en sentido contrario a la salida, por la parte alta de la hoz dirección Alcalá del Júcar, disfrutando de unas preciosas vistas y una senda técnica muy apreciada por los amantes de este deporte.
Al salir de la Gila, disfrutaron de las fantásticas vistas que esta ruta les ofrece, girando la vista pueden ver toda la hoz del río Júcar, el embalse que se crea a su paso por Tolosa, que también se puede ver, al igual que La Gila en lo Alto de la meseta.
Por este camino van viendo cómo el hombre ha ido aprovechando las formaciones tan caprichosas que esta piedra caliza, amplías cuevas metidas en la roca y que los pastores solamente han tenido que levantar una pared con piedras para así tener un lugar de protección y recogimiento para su ganado.
Así llegaron hasta uno de los miradores más bonitos y al mismo tiempo más desconocidos de esta localidad, con unas fantásticas vistas del pueblo y la hoz que forma el río y lo rodea, que el sol tuvo a bien iluminar.
Solo les restaba el descenso por la técnica senda del Batán buscando el punto de partida, con las preciosas vistas del pueblo acompañándoles. Como habían llevado buena marcha durante toda la ruta, se adelantaron un poco al horario previsto, por lo que aprovecharon para visitar las famosas cuevas de Alcalá, excavadas en la ladera, en este caso la de Masagó.
Maravillosa ruta por uno de los pueblos más bonitos de España, con buena temperatura y fantásticas vistas, que hicieron disfrutar a los senderistas de la belleza que esconde nuestra provincia, gracias a la iniciativa puesta en marcha por la Diputación Provincial de Albacete.
Las próximas citas serán el sábado 4 de noviembre en Valdeganga con “Fuentes y Manantiales” de 14 kilómetros de distancia, dificultad media-baja y salida a las nueve de la mañana de la Plaza Mayor del Municipio. Ya el domingo 5 en Balazote con “El Cuco y La Virgen del Puente” una ruta circular de 14 kilómetros de distancia y con salida a las nueve de la mañana desde la puerta del Ayuntamiento de Balazote.