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jueves, 23.05.2019

El español acumula 16 participaciones seguidas en Roland Garros. Oscar Otte tenía nueve años cuando Guillermo García López, su rival este jueves, disputó el primer partido de su carrera en Roland Garros. Fue en 2004 y entonces se midió al australiano Todd Reid, estrenándose con una de las 13 victorias que acumula en el cuadro final del Grand Slam francés. Es el mismo resultado que el español firmó hoy para superar al alemán en la última ronda de la previa por 3-6, 6-4, 6-0.

“Ese año fue la primera vez que venía a jugar Roland Garros. Tuve que afrontar la previa y la pasé. Conseguí pasar a mi primer cuadro final de un Grand Slam con 20 años, así que le tengo un especial cariño a este torneo”, reconoció a ATPTour.com nada más abandonar la Pista 11. “Fueron momentos bonitos, porque era la primera vez en mi vida que pasaba una previa para jugar Roland Garros. Fue emotivo”.

Tras una hora y 45 minutos, el jugador nacido en La Roda hace 36 años (alcanzará esta edad el próximo 4 de junio) levantó los brazos al cielo de París para festejar -acompañado por un grito de liberación- una de las 128 plazas disponibles para pelear por la Copa de los Mosqueteros. Es una tradición a la que García López no ha faltado desde que emprendió su camino en París cada temporada sin falta desde hace 16 años.

“Es curioso porque ahora en mi decimosexta participación también he tenido que jugar la previa. Es la segunda vez que me ha tocado jugarla”, repasó el español sobre su recorrido en el grande francés. “Haber superado la previa tiene su mérito, porque con 35 años que tengo… ¡también es duro!”, exclamó tras soltar una carcajada de inmediato.

Durante todo este tiempo de compromiso fiel a la cita parisina, el manchego tiene en la cuarta ronda firmada en 2014 el mejor resultado de su carrera. Aquella temporada fue la primera vez que se aseguró su presencia en la segunda semana de Roland Garros (perdió en octavos de final ante Gael Monfils), pero no la única en la que ha logrado victorias de prestigio.

Y es que en la tierra batida francesa guarda recuerdos memorables como los que firmó en 2007 ante Tomas Berdych; en 2014 y 2018 frente a Stan Wawrinka o en 2017 contra Gilles Muller. Todos han sido duelos con tintes épicos, conservados entre los más especiales de su carrera.

Eso sí, a García López le ha tocado volver a sus orígenes para estar entre los mejores en Roland Garros. “Estoy muy contento por esa marca de 16 participaciones seguidas, pero también por haber superado la previa de un Grand Slam”, confesó el español.

Ubicado en el No. 123 del Ranking ATP, ha tenido que rebasar tres peldaños para cumplir el objetivo: el americano Tim Smyczek, el serbio Pedja Kristin y el alemán Oscar Otte. “Nunca es fácil. Son tres partidos muy duros, con gente que está muy en forma y hay que dar el callo. He podido jugar a un buen nivel”, continuó explicando sobre su rendimiento en los días que acumula de competición en la arcilla gala.

Sin ir más lejos, en su último obstáculo no fue sencillo. “Hoy a partir del segundo set empecé a encontrarme mejor, aunque él estaba sacando bien. Pero logré romperle, hacer el set y creo que ahí él se ha desarmado un poco. Yo he cogido más energía y lo he aprovechado”, cerró antes de prepararse para emprender una nueva aventura en el cuadro final de París.