Sin concreción, no hay paraíso (Opinión)

Parece que se empiezan a asumir determinadas premisas con las que hemos venido especulando en las últimas semanas, la Federación Española ya ha tomado algunas. Todo sigue en el aire, pero se inclina por dejar la competición finiquitada, allá donde tiene potestad: 2ª B y 3ª.

Si esto es así, se abre una situación peliaguda de gestionar en el corto plazo y una bomba de relojería en el largo, si no se hace nada.

Particularizando en Segunda, si no se toman medidas, necesariamente traumáticas, ahora, más tarde o más temprano estallará. Si se aplican paños calientes y no se desciende a los cuatro últimos, si se amplía la categoría, puesto que parece que habrá cuatro ascensos, a ver cómo se gestiona el futuro.

Me acuerdo de cuando se aumentó la liga en Primera a veintidós equipos, aquello fue un contradiós, con el Alba implicado por cierto, y la Segunda, a día de hoy, todavía está pagando aquel desaguisado. Veintidós equipos, se mire por donde se mire, es una barbaridad.

El Señor de la Guerra, Javier Tebas, para entendernos, ya debería haber dejado dicho que si todo se anula, los cuatro últimos jugarán en Segunda B el año próximo y los tres primeros en Primera. Dejando, por descontado, tal afirmación en el frigorífico, por si la situación cambia de la noche a la mañana. No parece que tal cosa vaya a suceder, ni que la próxima temporada vaya a empezar en agosto o septiembre. A Tebas se le paga, entre otras cosas para tomar decisiones, no para hacer declaraciones y contradeclaraciones para no decir nada o lo contrario.

Entiendo que en algunos lugares no se quiera hablar de nada que no sea continuar una temporada, que podríamos denominar “coitus interruptus”, pero estar así, al albur del virus, no conduce nada más que a especulaciones e incertidumbre.

Independientemente de todo lo arriba expuesto, todos los equipos van a quedar tocados en todos los sentidos, pero se está perdiendo un tiempo precioso sin saber a qué atenerse. ¿Qué hacer con los dineros, los contratos, con los abonos, con los socios o lospatrocinadores, por ejemplo, si no sabemos qué será de nosotros?, estas cuestiones debería facilitarlas la rimbombante “LaLiga”. Retomar la competición se antoja una quimera y obligaría a empezar la 2020/2021 en octubre, con lo que volveríamos al cuello de botella y al desorden.

La Primera y las competiciones europeas tienen otras teclas, por eso sería bueno, que se fuera desbrozando el camino, del mismo modo que la federación ya ha asumido sus responsabilidades, bien, mal o regular, pero al menos se ha dado un paso al frente.

Tebas sólo piensa en el dinero, como todo hijo de vecino, pero de una manera inmediata y sin pensar en el futuro. Pan para hoy y hambre para mañana, se le llama a esa forma de hacer las cosas.

Barrunto que si en el Albacete Balompié se tuviese la certeza de que la temporada siguiente jugará en Segunda, se harían las cosas de otra manera, pero este suspense, no deja lugar a la planificación, ni a la toma de decisiones en firme. Si seguimos así, la perdiz terminará en terapia. Seguro.

P.d. – Dice el Vicepresidente del Gobierno que habría que eliminar los medios privados de comunicación, porque atacan la libertad de expresión, ¿tanto le molesta CINCOMÁSELDESCUENTO?