Lo del Fundación Albacete tiene mérito

Escrito por: 5 más el descuento

martes, 15.12.2020

Que la temporada 20/21 no está siendo fácil para nadie no es una opinión, es una realidad. Pero quizá para equipos como el Fundación Albacete está suponiendo un auténtico reto por las dificultades que se está encontrando. Aun así, las chicas de Miguel Ángel Quejigo parecen tener una capacidad especial para reponerse de los golpes. Su carácter competitivo es algo que parecen tener prohibido perder, a pesar de la incertidumbre de lo que será este curso y de lo que puede ser el siguiente. El objetivo es el mismo que el de la pasada campaña y todo apunta a que en la pelea van a estar. Así se le presume a las manchegas.

Casi un mes sin poder competir estuvieron las albaceteñas. El mes de noviembre arrancó con dos empates consecutivos ante el Tacuense y el Aldaia, pero la quinta y sexta jornada tenían preparadas los primeros dos aplazamientos para el Fundación en los encuentros ante los filiales de Valencia y Levante. Primero fue el equipo granota el que registró un positivo en su plantilla que impidió que el partido en Buñol se celebrara, y a la semana siguiente le siguió el combinado che para el choque que se jugaría en la Ciudad Deportiva. Tres semanas lejos de la competición oficial que rompen el ritmo a cualquiera.

Aun así, el mes terminó con una victoria por la mínima en la visita a Gran Canaria. Sin embargo, en el regreso a casa llegó una importante derrota ante el Villarreal, el líder del grupo. Las castellonenses consiguieron así romper la imbatibilidad del Albacete, que junto a Tenerife Sur, Granada, Racing y Real Sporting se mantenía como uno de los clubes de la categoría de plata que todavía no había perdido. Por eso el Fundación se mantenía como uno de los equipos llamados a hacer algo importante, candidato a destacar en el fútbol español y a volver a la máxima categoría, y las apuestas apuntaban a ello. Ahora lo sigue siendo, pero con alguna que otra duda viendo lo cara que está esa lucha por ascender.

El Fundación se adelantó ante el defensor del primer puesto con un tanto muy tempranero de Martita, pero el Villarreal fue a más en la segunda mitad y acabó dándole la vuelta al marcador. Remontada culminada en el minuto 88 que deja a las castellonenses con 18 puntos, nueve más que un Albacete que está con un partido menos que el resto, también que Real Unión de Tenerife y Alhama que son segundo y tercero con 16 y 13 unidades respectivamente. Por detrás, tan solo el Valencia podría llegar a igualar a puntos si lograra ganar el partido de desventaja que tiene con el plantel castellano. Posibilidades sigue habiendo.

Problemas en el inicio de la temporada

“El día a día del equipo está siendo muy bueno. Creía que el parón nos iba a venir mal, pero esas semanas que no se compitió liberó al equipo mentalmente. Hemos retomado la ilusión y vamos con la motivación de ganar”, decía Quejigo en la comparecencia previa antes del partido frente al Villarreal, en el que además se empezaba a aplicar la nueva normativa conforme a la presencia de público en los estadios. Nada de todo eso, ni si quiera la parte buena que trató de sacar el técnico de las albaceteñas de ese parón obligado, valió para llevarse los tres puntos frente al submarino.


Y eso también tiene que ver y deja en evidencia un cúmulo de hándicaps que el Fundación viene arrastrando desde la temporada pasada. Lo primero, la suspensión de la competición del curso pasado cuando todavía restaban ocho jornadas para el final. Las albaceteñas eran terceras a tan solo cuatro puntos de un Santa Teresa que fue el que se quedó con la primera plaza y logró el ascenso a la Liga Iberdrola. Golpe importante para un equipo que había hecho un gran esfuerzo por tratar de regresar cuanto antes al primer nivel del fútbol femenino español.

Y a eso también hay que sumarle el inicio fallido de este año. En un principio la fecha elegida era principios de octubre, después todo se paralizó debido a la situación sanitaria de la península, posteriormente la Federación paralizó los entrenamientos que el equipo ya había iniciado por la falta de un protocolo seguro, y finalmente hubo que esperar hasta que el 18 de octubre arrancó la competición. Todo ello sin unas medidas que protegieran en exceso a jugadores y cuerpo técnico, y que más tarde llegarían en forma de test.
A mediados de noviembre ha sido cuando el órgano federativo ha vuelto a cambiar la normativa y ha obligado a los clubes a hacer pasar a sus jugadoras un test semanal ante de cada partido. Las pruebas se tienen que presentar ante el árbitro para que este de el visto bueno como juez, sino se daría el encuentro por perdido al equipo que no cumpliera con ello. En definitiva, una serie de improvistos que han dificultado la labor del Fundación, un equipo diseñado para el ascenso, y de muchos otros de sus rivales en el grupo de Segunda. No le falta mérito al equipo manchego.