El sentimiento trágico del Alba (Opinión)

Escrito por: Bienvenido Picazo

viernes, 14.05.2021

Ni el más acérrimo de los albacetistas cree en el milagro, no tanto por falta de fe, sino por exceso de sentido común y un cierto sentimiento trágico de la vida. Este año, hemos tenido ración doble de realidad, de triste realidad.

En el Albacete Balompié, siempre que las cosas pueden salir mal, indefectiblemente salen mal.

Toca visitar a la UD Almería, equipo que está enfrascado en la pelea por el ascenso directo, no lo tiene fácil, como tampoco tiene matemáticamente asegurada su presencia en la eliminatoria para la repesca, pero tanto da. La diferencia entre rojiblancos y manchegos es demasiada para soñar con asaltar el estadio de los Juegos del Mediterráneo.

Ciertamente este trayecto camino del cadalso, se está haciendo eterno; no termina de llegar la sentencia definitiva y, por supuesto, todos los celebramos, pero resulta evidente que jugar a la ruleta rusa, con cinco balas en un tambor para seis, es demasiado para cualquiera. Ni les cuento para nuestro lastimado Alba.

En otras circunstancias, las estadísticas de los andaluces como locales, invitarían a un cierto optimismo, puesto que de diecinueve partidos han ganado nueve, lo que quiere decir que diez equipos consiguieron sacar tajada de su viaje al sur. Ahora ya no es tiempo de echar cuentas, se trata de ir a arañar como sea, si hay que poner el autobús (no veo otra táctica posible), pues se pone sin ningún complejo. Pelotazo, aprovechar algún golpe de fortuna y esperar que el rival no tenga su noche. Suponemos que nuestro destino es la derrota y que nuestra victoria se pagará cara en las apuestas, porque pocos confían en un posible zapatazo forastero.

Cualquier cábala deja de tener sentido, más allá de confiar en que los nuestros se conjuren y sigan creyendo. Deduzco que saben que pocos en Albacete confían en salvar la categoría, pero los profesionales que se visten de corto y, mientras cobren por llevar nuestro murciélago, deben imperiosamente salir a ganar, o al menos, a no dejar nuestro nombre y nuestra historia reptando por el fango.

Segundo examen para Fran Noguerol, que si aprobó con nota en su debut, ahora tiene la ocasión de reivindicarse. A nadie se le escapa que una victoria lo pondría en boca de todos y abriría una puerta a la esperanza que, hasta los más optimistas, cerramos hace unas cuantas jornadas. Cerramos la puerta, pero seguimos mirando con el rabillo del ojo, todas las andanzas de la niña de nuestros ojos.

Difícil resultaría, para miles de aficionados la vida sin nuestro Alba, espero que eso lo tengan bien interiorizado quienes se tienen que jugar la vida en Almería. Cuando ellos se despierten, si es que tal circunstancia puede todavía darse, cual dinosaurios, nosotros seguiremos aquí.