Escrito por: Hugo Piña
domingo, 18.07.2021
• Se cumple el cuarto aniversario de la llegada de Skyline Spain 2016 SL, holding empresarial que capitaliza el préstamo del socio-acreedor representado por la familia Kabchi, propietaria del Club.
El Grupo Skyline International cumple cuatro años al frente del Albacete Balompié. Con luces y sombras, el holding empresarial inmobiliario y de actividades en el sector turístico afronta un horizonte complejo en el que todo pasa por regresar -cuanto antes- al fútbol profesional. La categoría perdida la temporada anterior dictamina que las cosas no se han formulado bien en las oficinas del Club, sita en la prolongación de la Avenida de España.
De la estabilidad institucional al fracaso deportivo. Con este titular se resume la presencia del holding Skyline en Albacete, que pasa del gran registro en los asuntos económicos al merecido suspenso en lo deportivo. Pasa del excelente equilibrio monetario a un desastre en la confección de la plantilla del curso 2020/21. Del boyante momento institucional a la lamentable situación futbolística vivida la temporada anterior con hasta cuatro entrenadores: Lucas Alcaraz, López Garai, Alejandro Menéndez y Fran Noguerol.
Al César lo que es del César: el Albacete Balompié ha conseguido reducir la deuda total que a su llegada mantenía la SAD, tanto con Hacienda, Seguridad Social y lo más importante, con terceros. De hecho, el Albacete -y esto es un éxito total- ha salido ya del Concurso de Acreedores en que se encontraba desde 2010.
EL ALBACETE POST-COVID
Con la llegada de la pandemia, la gran mayoría de sectores económicos vieron gravemente afectada su actividad y economía, entre ellos el fútbol.
Es por ello que varios clubes españoles, de Primera y Segunda División, tuvieron que acogerse a las líneas extraordinarias de préstamos garantizados por el Instituto de Crédito Oficial (ICO), que el Gobierno aprobó durante el mes de marzo del pasado año, tal y como desvelaba un informe de los compañeros de ‘elDiario.es’.
Dicho aval del Estado rondó los 350 millones de euros, lo que permitió a varios equipos hacer frente a los estragos ocasionados por la paralización de las competiciones a causa del coronavirus. Las Palmas (2,6 millones de euros), CD Lugo (1,8 millones de euros) y CD Tenerife (800.000 euros) son los únicos conjuntos de LaLiga SmartBank que recurrieron a esta opción.
Por su parte, el Albacete Balompié no acudió a las ‘líneas ICO’ ya que el club manchego sigue mostrando autosuficiencia económica a través de la actual propiedad del club, la familia Kabchi.
SKYLINE, UN TERCIO EN DESCENSO
Skyline aterrizó en el Albacete Balompié allá por el verano de 2017. Desde entonces ha acumulado 4 temporadas en las que el bagaje deportivo es claramente insuficiente, con un proyecto que fue en decadencia y donde tras dos permanencias ‘in-extremis’ se ha terminado certificando la pérdida del Fútbol Profesional.
En su primera temporada en el club, Skyline se tuvo que encomendar a Enrique Martín para terminar salvando la categoría en el último partido en Tenerife. Aquella temporada, el Alba estuvo 10 jornadas en puestos de descenso. Sin duda su mejor momento en el club llegó de la mano de Ramis con el que se rozó el ascenso a Primera en la 2018/19 donde no se estuvo en ningún momento entre los 4 últimos.
Más apurada todavía fue la salvación en la 2019/20, donde Lucas Alcaraz salvó los muebles con una gran reacción al final y un penalti en el último minuto en Cádiz que salvó el proyecto tras estar otras 6 jornadas en descenso. Pero el pasado verano, lejos de mejorar se agrandaron los errores y el equipo ha estado la friolera de 39 de 42 jornadas en zona de descenso.
En total, 55 jornadas de las 168 disputadas desde que Skyline está al frente del club son las que el Alba ha pasado en puestos de descenso a Segunda B, más del 30% de los partidos. Un dato que demuestra el desastre de gestión en el plano deportivo.
Y CON TODO, SKYLINE SALVADOR DEL CLUB
El Albacete Balompié aprobaba el pasado mes de noviembre una nueva ampliación de capital que ascendía a 3 millones de euros y cuyo fin no era otro que minimizar lo máximo posible las tremendas consecuencias de la crisis económica provocada por el Covid-19. La enorme reducción de ingresos prevista (agravada tras la decisión del Gobierno de prohibir la publicidad de casas de apuestas en los clubes de fútbol), provocaba un problema de tesorería sobre todo para poder cumplir con los acuerdos que ya estaban vigentes.
«LaLiga nos ha dado herramientas de financiación para no tener problemas de tesorería, pero eso incrementaría el endeudamiento. Por eso el propietario ha querido que el proyecto que nos habíamos marcado se mantuviese»– decía por entonces el Consejero Delegado, CEO y vicepresidente, Víctor J. Varela.
Incluso el CEO Victor J. Varela cuantificaba en más de 20 millones de euros la inversión de Skyline en el Alba «en beneficio de la sociedad, esperando que crezca y, el día de mañana, pueda ser un excelente negocio», dando una estabilidad a una entidad que según el vicepresidente estaba en riesgo de desaparición antes de su llegada en julio de 2017.
