Escrito por: Rafa Gil
viernes, 17.12.2021
Lástima, una ocasión para traer a gente no habitual al Belmonte que se va al limbo. Hoy el Alba podría haber renacido, podría haber insuflado aire fresco en sus simpatizantes y podría haberse dado un homenaje antes de Navidad. La Copa para los equipos modestos puede ser una oportunidad para tener una motivación extra que la liga, la monotonía de los conjuntos de la tercera categoría del fútbol español, nunca te puede dar. Solo hace falta recordar lo que pasó hace 10 años en el Vicente Calderón, no era el mismo rival histórico pero haber superado al Cádiz te hubiera abierto puertas importantes. Hoy el Albacete estaba pensando más en el Algeciras, quería ganar sin desgastarse, sin entregarse. Nunca puso la máxima velocidad, no llegó a encerrar al rival en su área. Y así es imposible pasar a una siguiente ronde de la Copa del Rey.