Tercer ‘parón’ del Albacete en liga (Opinión)

Después del primer parón de Navidad, y el segundo –absurdo- propiciado por el negocio de la Federación Española de Fútbol en Arabia Saudí, viene el tercero, este ocasionado –como en todos los ámbitos- por la COVID 19, 20, 21 y 22. Muy raros son las competiciones, equipos o los centros de trabajo u ocio donde no haya aplazamientos, suspensiones, bajas laborales…y ahora le ha llegado al Albacete Balompié en el partido contra el Sabadell y, lo más probable, también contra el Castilla. Ya pondrán fechas y horas para “recuperarlos”.

Lo importante es que se recuperen los jugadores afectados –como todas las demás personas que están en “cuarentena”, sobre todo los que están en hospitales y UCIs- y que al final del mes se haya llegado a “doblegar la curva” de infectados, que se alcance el dichoso “pico” y ya vayamos dese entonces en línea descendente en cuanto al virus y el línea ascendente en la “normalidad” diaria.

A esa “normalidad” podría haber llegado el Alba como líder si hubiera ganado en Tarragona o si el Villarreal B no le hubiera ganado al Castellón en el partido aplazado, pero como eso no se dio, afrontará nuestro equipo la reanudación de la Liga tras este tercer “parón” en segundo lugar, al acecho del Villarreal B, quién sabe si con Kawayao algún otro nombre más en la plantilla (además de Márquez, Emmanuel y Alberto) y alguno menos de aquí al 31 de enero. Estos días le servirán también a la dirección deportiva para eso, para terminar de confeccionar el plantel que acometa la segunda vuelta con el firme propósito de conseguir el ascenso directo. Si no se consigue, parece que al menos, como premio de consolación, en los puestos de play-off sí que va a estar el equipo, pero lo iremos viendo, ya que, a estas alturas de la película que tenemos que vivir todos los días, no se pueden hacer planes a largo plazo (que se lo pregunten a Maestre y a otros “lesionados” por COVID) y es una incógnita, en primer lugar, cómo volverá el equipo tras estos “parones” y lo que irá deparando la accidentada competición.

Finalmente, veo bien que se recuerde –cuando se vuelva al Carlos Belmonte y a los otros campos- la obligación de llevar la mascarilla adecuadamente, porque hay algunos que la llevan por debajo de la nariz o de la boca, y que, además de ello, la seguridad privada se dé vueltas por las gradas para asegurarse del cumplimiento de esta y otras medidas de civismo.

SILVIO TÉBAR HERAS