Ni desazón, ni pesadumbre, ni dudas (Opinión)

Escrito por: Bienvenido Picazo

sábado, 09.04.2022

Primera constatación: el At. Sanluqueño CF ha ganado en cinco de sus salidas, ha empatado otras tres y ha perdido en siete ocasiones, o sea que suele volver a casa con algo en su maleta. No es que sea el león de la Metro, pero es cualquier cosa, menos un equipo fácil. Aunque es decimoquinto y apenas está dos puntos por encima de los puestos de descenso, pero como la categoría es tan perversa, únicamente dos victorias lo separan de la promoción de ascenso. Una locura, vamos, este grupo es una ratonera.

Un favorito para subir, como lo es nuestro Alba, está pasando las de Caín, ya que a ocho jornadas del final, todavía no tenemos asegurado, ni siquiera la repesca.

Toda esta introducción es para volver a recalcar que, este fútbol un poco cañí, está lleno de equipos de fuste y, si no estamos ya en Segunda, no es tanto desidia nuestra, como fortaleza de los demás. Debemos ponderar con tiento la evolución de los nuestros, porque tiene mucha tela la Primera RFEF.

No me canso de repetir que los cinco elegidos para la traca final, todavía no están nada claros, puesto que entre el cuarto clasificado y el décimo, hay una victoria de distancia.

La semana ha transcurrido con la lógica suspicacia después de un resultado adverso, pero ni mucho menos, la dinámica positiva del Alba se ha visto alterada. No creo que sea tan malo eso de perder cada diez partidos, hace que los jugadores se pongan de mal talante, aprieten los dientes y se conjuren. Habituarse al glamur de la victoria, hace que por momentos nos creamos inmortales y eso sólo conduce al fracaso. El Alba está obligado a estar siempre alerta y una serie de buenos resultados, distrae al más pintado.

Salvo tras la derrota en casa -que empatamos-, todos los demás berrinches siempre tuvieron como respuesta una victoria de los nuestros, no veo porqué ahora no habría de repetirse el cuento.

Somos superiores a los de Sanlúcar, en casa estamos intratables, los técnicos y jugadores están empeñados en recuperar la tensión y alcanzar el objetivo, tampoco sería ninguna quimera ganar. Los ingredientes los sabemos, humildad, carácter y, llegado el caso, mala leche, la categoría está llena de gente que sabe de esto del balompié, con la historia no se gana a nadie, hay que fajarse con inteligencia. Hemos visto a lo largo de la temporada, que hay pocos equipos que recurran a la testosterona y al patadón, salvo casos aislados o de extrema necesidad.

El fútbol español ha evolucionado una barbaridad y se ve por todas las categorías y edades. Lo estamos gozando y sufriendo en carne propia, pero tenemos recursos para volver al carril de las victorias.

Olvidemos lo que pase por otros campos y centrémonos en lo nuestro, porque mientras no se demuestre lo contrario, somos el equipo a batir.

Asumamos los galones, que somos el Alba, caramba.