Escrito por: Bienvenido Picazo
sábado, 17.12.2022
Sin solución de continuidad venimos de jugar contra el líder y nos encontramos de manos a boca, contra el colista, trampantojo total y absoluto. Los colistas, como no tienen mucho que perder, los suele cargar el diablo y al que se relaja contra ellos, zas, se lo lleva la corriente.
No voy a decir la bobada de que es peor esta cita, que la de la semana pasada, pero sí que voy a afirmar rotundamente, que como no salgamos contra la UD Ibiza, igual de enchufados que como lo hicimos en el Gran Canaria, apañados vamos.
Olvidemos la clasificación y vayamos a fajarnos de igual a igual, respetemos a los baleares, porque su nuevo entrenador, a buen seguro, va a cambiar el derrotero de un equipo que andaba completamente desnortado. A partir de ahora, veremos a los celestes ir hacia arriba, sin ir más lejos, si tomamos en consideración las últimas tres jornadas, el Ibiza estaría octavo, por esto y por la nueva moral que muestran, mucho cuidado.
El Ibiza tiene un plan a largo plazo y lo está desarrollando con la paciencia necesaria, no tienen prisa, pero, estos equipos con pinta de serios, aunque tengan una mala temporada, apuntan alto. Hace nada, deambulaban por Tercera y hoy, aquí los tenemos, con cara de quererse asentar y, ¿por qué, no?, poner en aprietos a su poderoso vecino.
Todo este preámbulo, no es ni más ni menos, que para ponernos en guardia y olvidar las cuentas de la lechera. Quien más, quien menos de entre los nuestros, ya está sumando y preparando la feliz primavera que se atisba en el horizonte. Tranquilidad, por favor, si queremos sumar, primero tenemos que correr más y mejor que cualquier otro rival. Rubén Albés y todo el plantel, ya han recuperado las constantes vitales y tras el partidazo de Las Palmas, se requiere toda la energía, para no perder la concentración. Sería una lástima que echásemos a perder, el impulso con el que volvimos de la última salida; ese partidazo, no debe ser flor de un día, así que recibir al colista, es un regalo envenenado. Si no nos sale bien la jugada, volveremos a las dudas, por ello, se hace necesario, salir a morder desde el principio, sin dejar tiempo al rival ni para que se coloquen sobre el césped. Si queremos llegar a la Copa y a la Navidad, con la satisfacción plena del deber cumplido, debemos ser nosotros mismos, salir siempre con el cuchillo entre los dientes y el mono de trabajo. Y, lo más importante, con toda la humildad del mundo.
Como el entrenador rival, nos conoce mejor que nosotros mismos, no vamos a tener mucha capacidad de sorpresa, la única táctica posible va a ser la del haka neozelandesa: enseñar los dientes y nuestras aviesas intenciones. Incluso así, no nos bastará, tendremos que hacerlo mejor que ellos. Apuesto a que Lucas Alcaraz, nos va a sembrar el campo de minas y va a aprovechar el menor resquicio que se presente. Sabedor de que nos cuesta un mundo marcar, imagino que tratará de ahondar en nuestro talón de Aquiles.
A ver si pronto llega mayo y las elecciones municipales y nuestro insigne ayuntamiento, se digna darle al Albacete Balompié y al Carlos Belmonte, el trato que merecen. Parece que sólo la proximidad de las urnas, despierta a algunos regidores.