Ya lo dice el tango: ocho puntos no son nada (Opinión)

Escrito por: Bienvenido Picazo

viernes, 10.02.2023

Jugar contra un histórico, aunque ande por los bajos fondos, siempre tiene su intríngulis. Si fuese un equipo más, creo que tendríamos ya los tres puntos, pero el Málaga CF, curtido en mil batallas, apoyado por una ciudad de mucho poderío, con un estadio de primera y con las prisas propias del rico que se ve al borde del precipicio, a mí no me inspira la menor tranquilidad. Para colmo, van a sentirse en el Belmonte como en La Rosaleda por el apoyo de unos cuantos cientos de malacitanos.

 

Nadie pensábamos que los blanquiazules iban a estar donde están a estas alturas, pero la Segunda no se casa con nadie y quien quiere peces, debe darse un baño de asiento con agua fría. Los de la Costa del Sol, ya han consumido unas cuantas vidas y, mucho tendrán que correr para salir del agujero donde habitan desde que comenzó la temporada.

 

Sus datos como visitantes son lamentables, apenas han ganado un partido y empatado cuatro, esto y vista la buena cosecha de nuestros últimos partidos en casa, lógicamente deberían tranquilizarnos, pero ya he dicho que la Segunda se gasta pocas bromas y cualquier pronóstico, fácilmente salta por los aires.

 

Los malagueños, si bien no han tenido mucha suerte, tampoco la han buscado, porque su gestión está resultando un fiasco desde cualquier punto de vista; lo mejor de los andaluces, hasta ahora, es su afición, que se muestra fiel en una situación que sería como para darse de baja. Ojalá, caigan derrotados en Albacete, y ojalá salgan después del atolladero.

 

Nosotros, a pesar del disgustito de la jornada anterior, seguimos de dulce y con la mirada puesta en enjugar, cuanto antes, los ocho puntos que nos quedan para llegar a la línea.

 

Si a todos los rivales hay que respetarlos, al Málaga doblemente, por su pasado y por el peligro que entraña enfrentarse a un equipo herido. Tras dos tercios de liga disputados, nuestros flamantes rivales bucean seis puntos por debajo de la línea de flotación, con lo que cada jornada que pasa, lo tienen más crudo.

 

Honestamente y dadas las trayectorias de Alba y Málaga, el pronóstico se cae por su propio peso, pero insisto: esto es la Segunda, así es que, que nadie se haga ilusiones de pasar un domingo tranquilo.

 

Los de Rubén Albés, están más que advertidos y, además, contarán también con el apoyo de miles de gargantas y corazones, que seguimos soñando y echando cuentas, pero siempre con los pies en el suelo. Sí, lo reconozco, estamos muy excitados, pero sabemos lo que es esto y el enorme mérito que tiene que nuestro Alba, ande tuteando a todos cuantos se le ponen por delante.