Escrito por: Bienvenido Picazo
lunes, 10.04.2023
El segundo gran petardazo de la temporada ha llegado en el momento más inoportuno, aunque, se me antoja que los desastres, por muchos objetivos que ya se hayan cumplido, nunca son bien recibidos.
El Racing de Santander que, muy probablemente hizo su mejor partido en toda la temporada, nos masacró y mereció de largo la victoria. Desconozco las razones por las cuales, últimamente salimos algo cansinos y desconectados de los partidos, después, siempre hay un momento en que volvemos a la vida, pero ceder tantos minutos al rival, es una frivolidad que no nos podemos permitir.
Ya no estamos en la zona VIP, todavía hay tiempo para revertir la situación, pero, ojo, que podríamos estar más abajo. No hagamos dramas, pero tampoco pasemos por alto, nuestras últimas prestaciones, que, en absoluto reflejan lo que ha sido el Albacete Balompié 2022-2023. Parece que la temporada se nos está haciendo un poco más larga de lo que ya es, que después de asegurar la permanencia, ha sucedido algo extraño que nos tiene abducidos y no somos capaces de sacar los partidos adelante.
El juego, salvo en El Sardinero, está siendo más que aceptable, pero los resultados se nos extravían tristemente, la afición sigue tras el equipo y las esperanzas por un futuro mejor, intactas. De ahí, que este sea el momento de la verdad, el punto en donde podemos hacer cualquier cosa, salvo perder el cuaderno de bitácora, que nos ha traído hasta aquí.
Albacetistas: ¡El Alba nos necesita!, no para animar más, no, sino para no acudir a las tertulias en la barra del bar con caras largas y llenos de pesimismo; en absoluto, más bien para todo lo contrario, para seguir siendo conscientes de lo que tenemos, e insisto: interiorizar sin falsas alharacas que todavía nos quedan varios comodines antes de cerrar, definitivamente el curso.
Olvidemos cuantos antes el chaparrón que nos cayó enSantander y pongámonos ya a preparar la próxima cita, pero, por favor, olvidemos los halagos que nos han caídopor tierra, mar y aire, porque tales piropos, manifiestamente, nos han debilitado. Rubén Albés tiene tarea para levantar a un grupo que está flirteando con la modorra.
Sigo pensando que la temporada ha sido brillante, pero no ha terminado y sería una pena quedarnos fuera de la promoción por errores propios. Ahora mismo da esa sensación, quiero creer que es una apreciación subjetiva y desenfocada, porque tanto los jugadores, como el cuerpo técnico, como, por supuesto, la propiedad, siguen queriendo jugar la promoción para dar el Gran Salto.
La semana que viene, saldremos de dudas.