Debutamos fuera contra un rival de campanillas (Opinión)

Escrito por: Hugo Piña

viernes, 25.08.2023

El CD Leganés, bien podría ser uno de los tapados del campeonato, aunque llamar tapado a un equipo que hasta hace bien poco jugaba en Primera, no me parece del todo adecuado. Han pasado una pequeña travesía por el desierto, pero con un buen entrenador, buen entramado social y buena gestión desde hace dos décadas, los del Sur de Madrid están llamados a mantenerse en la elite por mucho tiempo.

Butarque es un campo como otro cualquiera para empezar a mostrar la verdadera fuerza de los nuestros; el recuerdo del año pasado nos debe de servir de estímulo, porque en Leganés empezó todo. Y hasta aquí llegó el momento de la dulce melancolía, porque de nada sirve recrearnos en los recuerdos, por muy agradables que sean. Que lo son.

Hemos jugado ya dos partidos y todavía no tenemos ninguna conclusión que llevarnos a la boca, hemos pasado por diferentes sensaciones, pero como no terminamos de arrancar en casa,debemos quedarnos con la copla de que necesariamente, será fuera donde, como antaño, nos tengamos que buscar las habichuelas.

Quizá algún jugador esté nervioso por su futuro y por el suspense de los últimos días, quizá alguno dé el do de pecho, pero a lo peor, alguno se reserva; vamos a ponernos en lo mejor, o sea, que todos van a estar a tope y no habrá lugar a dudas. Confiemos en la profesionalidad de todo el plantel, porque hasta ahora no hemos tenido quejas. Se puede estar más o menos acertado, pero tratando siempre de respetar a quien te paga.

Este partido, bien podría ser punto de inflexión, porque si perdemos, los dos partidos disputados en casa cobrarán otra dimensión.

Lo que sí parece claro es que con dos entrenadores atrevidos vamos a pasar un rato entretenido y lleno de ocasiones en uno y otro arco. Confiemos en que nuestra defensa, nuestro centro del campo y nuestra delantera, se hayan confabulado para remar todos al unísono y sin desajustes que propicien los sustos a los que no nos terminamos de acostumbrar. Demostrada ya nuestra solvente capacidad de reacción, toca ponerse a hacer yoga o lo que sea, pero salir muy concentrados. Si cualquiera te desnuda el menor error, no digamos nada el Leganés, que, arropado por su público y sus pretensiones, bien podría darnos un escarmiento. Los nuestros también estarán muy protegidos por casi mil aficionados y, confiemos en que salgan con el cuchillo entre los dientes.

Donde juega el Alba hay emoción, con lo que, a buen seguro, el de Butarque será un partido muy seguido por terceros, puesto que resulta frecuente que los blancos generen una cierta locura que se apodera de todo el tapete y el juego resulta, sumamente divertido.Lo he hablado con muchos de los nuestros y, algunos, me consta que terminan los partidos tan cansados como los futbolistas, porque se pasan todo el partido al borde del asiento y saltando y moviéndose y rezando y gritando y hablando con todo el mundo y, uf, qué cansancio y qué estrés.

Sr. Albés, por favor, piense en los miles de corazones que dependen de sus estrategias y de sus jugadores y algún día, puede producirse una desgracia. ¿Hay en el Carlos Belmonte desfibriladores suficientes?