Dos citas asturianas (Opinión)

El partido ante el Oviedo está claro que estuvo condicionado por la expulsión de Álvaro (él mismo reconoció su error y que fue justa), porque 11 contra 11 parecía que el encuentro podría acabar empatado (ojalá a cero para que el Alba consiguiera no encajar, lo que hasta ahora solo ha conseguido en un partido), pese a los sustos que dio el equipo ovetense al principio. Pero hay que decir también que en dos jugadas a balón parado, en las que se puede igualar la superioridad o inferioridad numérica, el equipo albaceteño encajó los dos primeros goles. (Como en Alcorcón el equipo recibió 1, en Oviedo recibió 3 para seguir con la media de dos goles en contra en cada partido fuera de casa). Incluso una vez conseguido el tercero parecía que el Oviedo podría marcar algún gol más; se rehízo un poco el Alba pero volvió a caer fuera, inapelablemente, lo que hacía necesaria una victoria en casa la siguiente jornada, ante el otro equipo asturiano. (Y con la sensible baja de Lander).

Es evidente que ya que a nuestro equipo le cuesta mucho marcar debía mejorar comenzando por intentar y conseguir mantener la puerta a cero; pues ya sabemos que los gijoneses nos endosaron otros 3 goles (aunque se llevaron ellos 1), como los ovetenses. Los porteros no tienen confianza y no dan seguridad a la defensa, que tampoco hace mucho para dar seguridad a los porteros ni al resto del equipo  (véanse, además de otros anteriores, los dos primeros goles ante el Spórting). Y ahora qué hacemos, ¿juega contra el Huesca el portero del Albacete B?  El Alba es el segundo equipo más goleado de la categoría, lo que implica que para ganar los partidos tendría que marcar muchos goles, lo que tampoco se cumple. Tendría que empezar ganando contra los oscenses –como contra el Alcorcón- intentando además dejar la puerta a cero y seguir consolidando la defensa en los siguientes partidos hasta que aproveche más alguna de las oportunidades que tiene en todos los partidos (ante el Spórting 3 muy claras antes del gol a favor y 2 de ellas antes del primer gol en contra), que pasa porque cojan la forma y/o acaben los problemas físicos de los delanteros, los que en principio deben ser mayoritariamente los encargados de anotar –aunque ahora, dada su sequía, han colaborado defensas y centrocampistas en esa labor-, ya que sobre todo los primeros tienen que afanarse más en su tarea primordial de defender.

También es cierto que si el Alba tuviera una racha favorable, alguna de las 3 ocasiones que tuvo contra el Spórting hubiera entrado, pero en esta negativa le entró al final el centro-chut de Silva, que ya lleva 2 goles, sin tiempo para nada más. Esperemos que desde Huesca se mejore defensiva y ofensivamente y la racha cambie. ¡Aúpa Alba!

SILVIO TÉBAR HERAS