El propósito de año nuevo en el Albacete: mejorar sustancialmente en defensa

Escrito por: Hugo Piña

lunes, 01.01.2024

El talón de Aquiles del Albacete Balompié de Rubén Albés ha sido, sin lugar a dudas, la defensa. Ya lo fue en la meritoria campaña donde se jugó play off y lo ha sido recientemente en la primera vuelta de LaLiga Hypermotion. Los números son los que son y las sensaciones, también.

El planteamiento canalleta de Albés guarda ciertas grietas defensivas que hasta el curso pasado se tapaban con el gran acierto de jugadores como Maikel Mesa, Dubasin o Manu Fuster. Esta campaña las cosas no están saliendo tan brillantemente como la anterior, algo que ha obligado al técnico vigués a buscar alternativas.

La realidad en la defensa del Alba este curso presente ha sido la ausencia de Boyomo. Solo él difiere en la retaguardia de un equipo que además ha bajado parcialmente las prestaciones mostradas hace un año. Sorprende sin embargo que la sola ausencia del camerunés Boyomo haya trastocado tanto los planes en la defensa del equipo, siendo el resto de integrantes los mismos salvedad hecha del africano.

Glauder, Djetei y el refuerzo de Datković han mostrado graves lagunas defensivas. Condicionados eso sí por el planteamiento ofensivo y canalleta de Albés, los defensas sufren como nunca en un estilo que el pasado curso contaba con el acierto en las dos áreas. Este sin embargo es al revés, y el acierto es de los rivales, lo que demuestra a las claras la situación en la clasificación del Albacete: 3 puntos por encima de la zona de descenso.

La defensa para esta campaña sigue siendo casi la misma. Incluso el refuerzo de Jonathan Silva por la izquierda con la continuidad de Carlos Isaac y Álvaro Rodríguez. En definitiva, y sumado al doble pivote formado por Riki y Lander, muestran esta campaña numerosas grietas que Rubén Albés y su equipo habrán de taponar en 2024.

Quizá ser menos kamikaze en ataque y mostrar mayor solidaridad defensiva, quizá reforzar la zaga con un futbolista de características necesarias, o bien apuntalar -con lo que hay- un estilo más conservador desde el delantero hasta el portero. Y la primera prueba de 2024 será de fuego ante la principal kriptonita de Albés, un Levante que ha hecho y desechó a su antojo aprovechándose de las debilidades de los manchegos en defensa.