Escrito por: Hugo Piña
domingo, 14.01.2024
«Ya manifesté en su momento que necesitamos mejorar, incorporar futbolistas porque nos espera una segunda vuelta tremendamente exigente»
, señalaba el pasado viernes Rubén Albés sobre el mercado de invierno.
La derrota de ayer ante el Levante mostró una vez más las vulnerabilidades de un equipo que ha encajado 34 goles en los 22 partidos disputados hasta la fecha. Por tanto, el Albacete es, junto al colista Cartagena, el equipo que más goles en contra dispone en su haber.
El preparador vigués enfatizaba en los últimos días sobre el mercado que hasta la fecha no ha tenido movimiento alguno en clave albacetista que «para eso están los mercados de invierno. Ojalá puedan llegar cuanto antes porque el tiempo pasa», apuntaba en la última conferencia de prensa de Albés.
• Sin fichajes, la afición mira a la propiedad
El 3-2 del Ciutat de València evidenció el malestar de una parte importante de la afición del Alba. Con la dirección deportiva mirando hacia el cantábrico y en busca del sustituto de Alfonso Serrano, el albacetismo asiste a un mercado invernal tan atípico como necesario.
Sin movimiento alguno en los trece días que se llevan de mercado, la afición albacetista se muestra escéptica en torno a un capítulo de altas que por lo visto hasta ahora se hará de rogar.
El Albacete sondea el mercado pero la realidad -económica- impide agilizar nuevas llegadas. Desde un portero hasta un extremo pasando por reforzar la evidente zona más débil del equipo, la defensa. Muchas necesidades y poco, por no decir ninguno, movimiento.
Y mientras tanto las redes sociales y los foros se llenan de comentarios y quejas hacia el inmovilismo de directiva y propietarios del Alba, que prefieren trabajar en silencio con el objetivo de asestar los golpes concretos y certeros en el momento adecuado. Restan poco más de dos semanas y entre salidas y llegadas podríamos estar hablando de, previsiblemente, tres o cuatro operaciones.