Escrito por: Hugo Piña
miércoles, 28.08.2024
Sin hacer ruido. Ahí se colado el Albacete Balompié, que suma dos victorias en las dos primeras jornadas del campeonato nacional de liga. Los manchegos han ganado a sendos aspirantes al ascenso como Granada y Elche, equipos con poso en la categoría pero donde Alberto y sus jugadores han conseguido minimizar las envidiables fortalezas andaluzas y alicantinas respectivamente.
Sin embargo, las victorias del Alba han dejado tras de sí polémicos comentarios vertidos desde la sala de prensa. No se tomaron bien ni Guille Abascal ni Eder Sarabia sus derrotas ante un Albacete que quizá no jugó mejor pero sí ganó merecidamente. Los dos partidos, mostrando sus armas y condicionando la apuesta del rival.
Seis de seis en el casillero y pese a todo se intuye cierto tufo a rancio en los comentarios de los técnicos derrotados. Sonado fue el de Abascal, tras el 1-2 en Granada: «No hemos dejado construir nada al rival y hemos dominado, si hubiésemos transformado las ocasiones tendríamos hasta un resultado abultado», dijo tras la primera victoria del Alba sobre un recién descendido como el Granada. El preparador sevillano, y no contento con eso, achacó la derrota también al árbitro -Ais Reig- y juego sucio rival: Hoy la personalidad del equipo estaba presente ante un condicionante como el tiempo perdido y las pausas propiciadas por el rival. Lo que no está en nuestro control esperamos que a la próxima sea equivalente para los dos equipos», dijo.
No contentos con la sobrada del sevillano, el Albacete de Alberto se enfrentó al Elche, otro rival con aspiraciones y al que nuevamente, con sus armas, venció por 1-0. Eder Sarabia, conocido por sus excusas balompédicas, destacó tras la victoria del Alba con gol de Fidel que «es imposible que juguemos este partido otra vez y lo perdamos», indicó. El vasco, dolido por sumar su segunda derrota al frente del banquillo ilicitano llegó a asegurar que «el resultado es injusto, nos hemos impuesto en casi el 80% al rival. Hemos controlado mucho, y si hubiésemos hecho algún gol en situaciones claras nos podríamos haber llevado el partido», manifestó Sarabia.
Y entonces, ¿en que quedan las dos victorias consumadas con gran acierto y efectividad del Alba? El menosprecio que se deduce de estos argumentos de los técnicos Abascal y Sarabia contrasta con la felicidad que se vive en el Belmonte. Seis de seis para un equipo que sabe lo que costará llegar al objetivo planteado de los 50 puntos. Eso sí, la soberbia de los rivales al ser derrotados por el Albacete sobra. Más que nada porque engrandece aún más el impecable trabajo de un Alberto que sin hacer ruido está elevando los niveles de un equipo que a su llegada estaba -no lo olvidemos- penúltimo en la clasificación.