Escrito por: Rodrigo Quero
miércoles, 18.09.2024
El pasado fin de semana, el Albacete dejó una novedad significativa en su alineación: Riki Rodríguez, uno de los pilares del equipo desde su llegada, fue suplente en el partido ante el Mirandés en Anduva. El centrocampista ovetense, considerado uno de los intocables en el esquema de Alberto González, dejó su lugar en el once inicial por primera vez en esta temporada, en un intento del técnico de cambiar las dinámicas del equipo y mejorar el rendimiento colectivo.
Riki Rodríguez ha sido una pieza fundamental para el Albacete a lo largo de varias temporadas, destacando bajo las órdenes de Rubén de la Barrera, Rubén Albés y ahora con Alberto González. Su importancia quedó clara en las primeras jornadas de esta campaña, siendo uno de los tres únicos jugadores que había disputado todos los minutos, junto a Raúl Lizoain y Jon García. Sin embargo, su suplencia en el choque contra el Mirandés rompió esa racha, dejando a Raúl y Jon como los únicos futbolistas que han jugado todos los encuentros de titular.
Pese a comenzar el partido en el banquillo, Ricky tuvo que saltar al campo antes de lo previsto debido a la lesión de Jaume Costa en el minuto 35. El centrocampista asturiano terminó jugando 55 minutos, pero su nivel sigue estando lejos de su mejor versión, la que mostró especialmente en las primeras jornadas de liga, como en los partidos ante el Elche y el Granada, donde fue clave en las victorias del equipo.
La decisión de Alberto González de dejar a Riki en el banquillo refleja la búsqueda de una reacción dentro del equipo. El Albacete acumula tres derrotas consecutivas y el rendimiento en las últimas jornadas ha generado muchas dudas. El técnico parece dispuesto a hacer ajustes para revertir la situación, y la suplencia de un jugador tan importante indica que nadie tiene asegurado su puesto.
Ahora, la incógnita reside en si Alberto González volverá a contar con Riki en el once inicial este fin de semana en el encuentro contra el Racing de Ferrol, o si optará nuevamente por dejarlo en el banquillo. Lo que está claro es que el Albacete necesita cambios para recuperar la senda de la victoria, y recuperar la mejor versión del ovetense será clave en ese proceso.