Si ha habido algún partido en la historia reciente del Albacete Balompié que sus aficionados no olvidan se dio aquel 11 de junio de 2022 donde, con todo preparado para el ascenso del Deportivo, el Alba de Rubén de la Barrera logró una heroica remontada que se culminó en la prórroga para lograr el ascenso a Segunda. Un partido que quedó marcado para todos los presentes pero donde apenas dos años y tres meses después apenas continúan en sus clubes.
En el caso del Albacete, tras las últimas salidas de jugadores como Dani González y el central Djetei, es Riki Rodríguez el único que todavía resiste. En la temporada inmediatamente posterior al ascenso fueron 8 jugadores, el curso pasado 5 y en el actual solo el centrocampista resiste a salir de un club donde se ha consolidado como futbolista.
Los gallegos volverán este viernes a enfrentarse al Albacete y lo hacen con 3 jugadores que perduran de aquella cita: el defensa Jaime que apenas cuenta con minutos, Diego Villares que sí está siendo importante en este arranque liguero y el talentoso Mario Soriano que ha vuelto este verano tras su cesión al Éibar. Varios jugadores deportivistas de aquel entonces se han retirado o están sin equipo pero es el caso de Quiles el más llamativo, que resistió un año más en el Depor pero en el verano de 2023 recaló en el club manchego marcando 10 goles en su primera temporada en Segunda.