Escrito por: Carlos Gómez
miércoles, 02.10.2024
Entiéndase la ironía del titular.
La reciente noticia de la retirada de Iniesta ha puesto un tema de discusión en el foco de toda opinión deportiva en Albacete: la relación entre Iniesta y el Albacete Balompié. Principalmente, esto se debe a que vemos en la misma segunda división dos casos concretos, el de Lucas Pérez y Cazorla. Ambos han vuelto al equipo de su infancia (Dépor y Oviedo respectivamente) para jugar en sus últimos años de su exitosa carrera internacional. Esto es lo que se le está ‘echando en cara’ al jugador manchego, que siendo una absoluta estrella del fútbol mundial, nunca volvió al Albacete Balompié para irse varios años a Japón o Arabia Saudí, donde ya sabemos de sobra que los futbolistas no ganan precisamente poco dinero.
El palmarés y la carrera de Iniesta, la persona que hizo a España campeona del mundo por primera y única vez en su historia, es intachable. Pero poca gente sabe que, sin Andrés Iniesta, seguramente, los albaceteños no tendríamos equipo profesional de fútbol. Sin necesidad de ofender y solo poner un ejemplo, podríamos haber tenido en Albacete algo parecido a lo que ocurrió en Salamanca. De no ser por Iniesta, claro está.
En el año 2011, el Alba era uno de los muchos equipos de Segunda y Segunda División B que debido a deudas e impagos corrían un peligro inminente de desaparición. El equipo que maravilló a España en los años 90 habría quedado en el olvido, pero Iniesta, albaceteño y canterano del club, compró 7.000 acciones por un valor de 420.000 euros en una situación de quiebra absoluta. Andrés, en 2013, con el club aún en peligro de desaparición, pagó otros 120.000 euros para que el logo de su empresa (Bodegas Iniesta) patrocinara al club.
La principal aportación del de Fuentealbilla fueron unos 240.000 euros que pagó para hacer frente a los impagos a jugadores y trabajadores del club. De lo contrario, el Albacete Balompié podría haber descendido a Tercera División de forma administrativa.
Mucho dinero puso Andrés Iniesta hasta el año 2013 –que recuperó en 2017 con la venta del club- para salvar al club de su infancia. Ya con Skyline, el Albacete Balompié ha disputado dos Play Off de ascenso a Primera División, además de que ha jugado ocho temporadas (de nueve que lleva la directiva) en el fútbol profesional. Todo ello, gracias a la aportación de Andrés Iniesta en un momento crucial para la estabilidad económica del club manchego, que sobrevive hoy día con unas cuentas más que saneadas en el fútbol profesional.
Es un completo disparate ‘echarle en cara’ a Andrés Iniesta que no haya venido a jugar al Albacete en una buena época de la historia del club, cuando estuvo en primera línea de batalla en, sin duda, la peor etapa de la historia del Albacete Balompié. Cierto que recuperó su dinero. Pero para nada estaba asegurado. El jugador puso el dinero ‘con los ojos tapados’, podemos decir. Sin saber que iba a pasar con el club.
No seré yo quien le diga al aficionado lo que tiene que hacer o pensar, pero sí es cierto que, cuando pasamos cada domingo al Carlos Belmonte, podríamos tener en cuenta que disfrutamos de un club en el fútbol profesional gracias a la aportación de Andrés Iniesta, ese al que «nunca le importó el Albacete Balompié«.
